Con el estilo vintage, vuelven a resurgir clásicos de toda la vida, en este caso los mosaicos blancos, y es que el blanco está de moda.
Se aplican en cualquier formato: planas, biseladas, hexagonales … y se pueden adaptar en cocinas y baños de diferentes estilos: rústicos, industriales, vintage o nórdicos.
La diferencia de las de antaño a las actuales está principalmente en la manera de colocarlas, antes se evitaba al máximo las juntas y ahora se marcan más con colores oscuros.
Una combinación perfecta es con el negro, bien sea con el suelo negro y paredes blancas, mobiliario muy oscuro con las baldosas blancas o el clásico suelo de damero blanco y negro.